Conflicto en Malta.

En la madrugada del viernes, y a golpe de somier roto, una de las huespedes del hotel, se vió obligada a llamar a la policía al oir mucho escándalo. Los policias que subieron a la habitación, donde aparentemente, se hospedaba el sujeto, escucharón mucho alboroto. Lo que parecía una fiesta, no fue ni más ni menos, que un ataque verticual coital, con desgarro por parte del varón en la parte del muslo interno, a lo que se cree que era su pareja. La chica convalenciente, y diciendo reiteradamente, con los ojos en blanco, por respeto no, no quiso denunciar la situación. Por otro lado la policía vio que dicha mordedura, que parecia ser de un rottweiler mezclado con un pastor belga, coincidia con la fisiológia y estructura de la boca del supuesto culpable. A pie de foto las pruebas del delito.