Luis Berbiela Garcia abandona PLL en busca de nuevos retos

El Mallorquín asentado en Madrid y hasta ahora Junior III de Perez Llorca ha decidido, por fin, dar un paso adelante en su carrera profesional. El hecho de haber recibido ya una corbata de Hermes por parte de sus amigos el dia de su cumpleaños, algo para lo que llevaba ahorrando los últimos 15 años, ha sido uno de los detonantes para tomar la decisión. Luis Berbiela deja atrás la abogacía tras una larga lista de éxitos profesionales. Como haber conseguido teletrabajar un dia que tuvo covid (algo impensable en el sector hasta su llegada a Paseo de la Castellana 50), haber sido el primer junior en fotocopiar y cambiar con tipex una sentencia de 760 páginas, algo que se considera un hito dentro de la profesión, a pesar del gasto que supuso en tinta y en psicólogo para el trabajador de IT que le asistió en esta labor, y por último, pero no menos importante, haber conseguido asistir a la boda de su mejor amigo un día que tenían una reunión para comentar y preparar un arbitraje de acciona que se celebrará en 2043. La vida profesional llevará a Luis por otros derroteros a partir de 2022. Esos derroteros no son otros que, los fogones. Su verdadera pasión desde niño. Con todo el dinero que había ahorrado durante estos últimos 15 años para comprar una corbata de Hermes que usar en su primer juicio (algo que nunca llegó) y el apoyo económico de JP Morgan y Goldman Sachs de la mano de los socios: Jorge Gandara y Gonzalo Aviles, amigos incansables del mallorquin-pucelano, Luis Berbiela ha decidido adquirir la tradicional Casa de comidas LONGINOS, en la famosa calle de General Martinez Campos, en pleno centro financiero de la capital. El nuevo dueño ha afirmado que los cambios en el local serán mínimos. A los ya tradicionales platos de la casa como los filetes rusos o el consomé en Junio, llegan para quedarse platos estrellas de la casa Berbiela como la verdadera carbonara, el pan con aceite, el tomate aliñado, el solomillo Wellington y las pechugas de pollo empanadas. El nuevo dueño ha afirmado su esperanza en este nuevo proyecto: ?Al final del camino, lo único que merece la pena es beber vino y comer cocido y eso es justamente lo que vamos a incentivar en esta nueva etapa de Casa Longinos.? Además del exletrado se unen al proyecto sus fieles compañeros; Ignacio Lesmes (KPMG), Marta Villar Martín (A&O), Maria Clavell (B&M) e Inés Urbizu (que únicamente ha solicitado un despachito para poder cantar los temas agusto). Todos ellos han resaltado que en realidad odiaban sus trabajos y solo les interesan los manteles y las servilletas. Además, su nuevo local de trabajo se encuentra a escasos metros del Bar El Yate. Bar parroquiano de Madrid que transitan desde hace años. Esperamos que la iniciativa tenga el éxito que se espera de gente tan preparada. Parece un proyecto apasionante y es admirable como los jóvenes, a pesar de la pandemia, siguen descubriendo sus verdaderas vocaciones y motos vitales. Desde este humilde periódico les deseamos muchos éxitos.