8 de cada 10 mujeres quieren casarse con Cesar
Ja ja ja, ¡fuiste engañado!
¡ERA UNA BROMA!
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"Tenía un hogar lindo, como ella misma me lo decía. Llevábamos nueve años de convivencia, no nos habíamos casado porque él ya lo había hecho por lo católico. "Todo comenzó cuando él contrató a una asistente en el centro de homeopatía. Una mujer bonita, pero nada del otro mundo. Una tarde nos invitó a tomar onces y desde ahí noté algo extraño. Fue el chocolate más caro que me he tomado. Ese día me dijo que cuidara a mi marido porque las mujeres le caían como pirañas, pero la piraña era ella. "Las llamadas sospechosas que constestaba en voz baja y la insistencia para que un sábado me fuera a hacer compras con una amigas me hicieron sospechar. Ese día le caí de sorpresa. Encontré en mi cama la cartera de esa mujer; sigo sin saber cómo lograron salir de la casa. "No volvió en cuatro meses. Mandó a decir con uno de sus hijos que estaba en recogimiento. Le quemé la ropa y le vendí lo del centro homeopático. Cuando volvió lo perdoné. Ahora vive con ella, a mí me paga el arriendo y los estudios de belleza a cambio de sexo. Es un buen negocio".