Hombre no deja de flagelarse mientras trabaja
Ja ja ja, ¡fuiste engañado!
¡ERA UNA BROMA!
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Sucedió en el Centro. Emanuel (veintiocho) se considera autodidacta y está determinado a dotar de una nueva imagen al departamento que alquila: un dúplex ubicado en Bv. San Juan al quinientos. Pero el único dote que se puso en cuestión, en la mañana de hoy, fue el suyo propio, al rasurarse accidentalmente las partes pudendas, mientras colocaba silicona en las hendijas de un piso flotante. Expertos no encontraron relación lógica entre el daño recibido y la actividad que el joven realizaba. Se especula que el susodicho se disponía a enjuagar una rejilla con la que retiraba el excedente de silicona cuando un mueble de bajo mesada en mal estado estructural amordazó superficialmente su escroto, produciéndole una lastimadura que lo obligó a interrumpir la tarea. De todos modos, Emanuel alega con tranquilidad que ya está acostumbrado a los accidentes dentro del hogar. «Yo simplemente me dispongo a realizar una actividad y todo sale relativamente bien hasta que veo alguna manchita de sangre; entonces me doy cuenta de que tengo que parar y ver qué pasó», nos explica. Con este ya se se suman diecinueve casos de heridas infringidas por él mismo, ?con certeza? un peligroso ejemplo de despiste.