Murió dejando un gran mensaje

El sábado por la tarde se hizo viral el vídeo de Héctor Giménez (1933-2017), un hombre que falleció ese mismo sabado, a la edad de los 81 años. En su vídeo podemos ver y escuchar su arrepentimiento por no haber disfrutado su vida como le hubiese gustado. El vídeo no solo se hizo viral por la dramática situación en la que el hombre se encontraba sino también por el mensaje que nos deja. Cuenta como su primo Raúl Giménez (1935-2012) se mudó a vivir con él y su familia a la edad de 11 años por el fallecimiento de sus padres (tíos de Héctor). Cuando Raúl se mudó a la ciudad, todos los amigos de Héctor también lo fueron de Raúl y todas las chicas de la escuela estaban enamoradas de él. Héctor nunca perdió a sus amigos ni la atención de sus padres, pero si disminuyó la contención que le daban ambas partes (amigos y familia). Siempre se sentía superado en todo por su primo, y apenas a los 80 años, cuando fue diagnosticado con cáncer, cayó en la cuenta de que Raúl había perdido a sus padres, mientras que él nunca había sufrido esa pérdida a tan joven edad. Cuenta como él cerraba los ojos e imaginaba su vida perfecta, pero al fin y al cabo, era conciente de que eso no era real. Este hombre nos deja una gran lección para nuestra vida: el amor que recibamos, por más mínimo que sea, debe ser valorado y aceptado, disfrutar de cada momento y de nuestra vida propia, dejando de compararnos con los demás, dejando de soñar nuestra vida y empezando a vivir nuestros sueños.