Científicos canadienses logran reproducir un corazón humano que permitiría a su portador no enamorarse jamás
Ja ja ja, ¡fuiste engañado!
¡ERA UNA BROMA!
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Es sabido, desde tiempos inmemoriales, que el amor no es plato de buen gusto para nadie ya que como dice Sabina, cuando no muere, mata. Es por ello que el mundo entero se ha revolucionado esta madrugada, cuando científicos de la universidad de Banks, en Canadá, han afirmado haber conseguido reproducir mediante procesos tecnológicos, el primer corazón humano que permitiría a su portador no enamorarse jamás. Durante el ultimo trimestre de 2016 han llevado a cabo un estudio clínico sobre pingüinos emperador, símbolos del romanticismo por excelencia dada su monogamia y sus especiales rituales para encontrar pareja. Tras el estudio se confirmó que no solo no han vuelto a unirse visceralmente a otro ejemplar de su grupo, si no que además disfrutan de orgías sexuales y demás fiestas eróticas donde reinan el respeto y la tolerancia. A esta hora la fila de gente a las puertas de la universidad Banks a la espera de un trasplante da cuatro veces la vuelta a la manzana. ¿Será este el comienzo de un nuevo mundo donde la raza humana deje de sufrir por amor y empiece a diafrutar de la vida?
